Hojaldre sin gluten

Desde que he reducido la ingesta de gluten mi estomago va genial, mis digestiones muy ligeras y nada pesadas y por nada del mundo me gustaría volver a consumirlo, así que en lo posible lo evitaré. Tan solo lamentaba ciertas recetas ricas que creía iba a tener que dejar de comer, como es el hojaldre. Es de las masas que mas me gustan, desde una simple palmera hasta cualquier tipo de aperitivo... si lleva hojaldre me encanta. Así que no quedaba mas remedio que buscar la forma de consumirlo sin gluten.




Esta masa tiene la mala fama de ser complicada y laboriosa pero nada mas lejos de la realidad. Si nos organizamos bien y sobre todo, no hay prisa para hacerla es la masa mas sencilla y fácil de hacer. En mi caso hice la masa mientras hacia unas tostadas y a la nevera. Me olvidé de ella hasta que a media mañana me acerque a picar algo y aproveché para hacer el estirado de la masa y los primeros dobleces... y a la nevera de nuevo. Después del almuerzo y recogida la cocina aproveché para hacer unos cuantos dobleces mas... el caso es que para la cena no me pude contener y hice unos cuantos rellenos de jamón y queso y eso que era para el día siguiente pero no me pude resistir para probarlos, además aproveché para guardarlo en papel de hornear para el día siguiente.
Y esta es la receta:


Hojaldre sin gluten

Ingredientes:

  • 180 ml agua,
  • 50 g mantequilla,
  • 3 gr de sal,
  • 300 gr de harina sin gluten,
  • 1 gr de goma guar,
  • 160 gr de mantequilla para formar el hojaldre.


Elaboración: 

Se mezclan los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. 
Se cubre con film transparente y se deja en la nevera durante media hora. 


Se extiende la mantequilla entre 2 hojas de film transparente y se enfría al mismo tiempo que la masa.


Se pone la masa sobre la encimera enharinada o sobre film transparente para evitar exceso de harina y se extiende con un rodillo hasta tener una lámina muy fina. 
Se pone la mantequilla sobre la masa.
Se hacen tantos dobleces como se pueda y se vuelve a extender con el rodillo.

  
A partir de ahora se hace 4 sesiones de 3 dobleces (estirar formando un rectángulo y dos dobleces hacia adentro de modo que salgan 3 capas). 
Se vuelve a guardar en la nevera hasta que lo necesitemos para hacer nuestra receta.






 

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