Tarta de chocolate y malvavisco

Os presento una tarta rica donde las haya.



Esta tarta similar a la de muerte por chocolate, tiene la particularidad de llevar malvavisco o marshmallow, como queráis llamarlo, que al aplicarle la llama del flameador o pistola de cocina lo funde y mejora enormemente el sabor del chocolate.
Para el reto Cooking the chef se propuso hacer un homenaje a la cocina de Zoë Françoise, una gran chef que decía :

“La peor crítica que podría recibir es que mis clientes dijeran que la cena ha sido aburrida”. 

Y es que ella la hace mas que divertida, su pasión por la pastelería la lleva a hacer grande obras maestras como las que tiene AQUÍ. Y de ahí he sacado esta rica idea aunque no con un malvavisco hecho como el de ella, casero y sin nada de colorantes, este es comprado pero sale riquísimo.

Os cuento un poco de ella:

Zoë tiene una de esas vidas de película. Creció en una comuna en Vermont en los 60. Y tal cómo nos dice en su bio, un tiempo en el que hacer granola, cultivar abejas y vivir de la tierra eran ideas “radicales”. 
Era una comunidad que se alimentaba de lo que podían producir por ellos mismos, a pesar de estar en medio de una zona desértica. 
Cuenta Zoe, que con la edad de 8 ó 9 años ya intentaba cocinar por si misma. Juntaba ingredientes y luego se comían “los productos” con sirope o fruta. 
Cuando descubrió el libro de cocina francesa que editó Time Life Books, y que aún tiene, empezó la creatividad a fluir de ella. Hizo cada uno de los dulces que vió en ellos. 
Su primer trabajo fue en Ben&Jerry’s (una conocida cadena de helados) en Burlington, Vermont. Hacía helados. 
Este trabajo la enseñó a sostener una bolsa de masa y hacer preciosas decoraciones con ella. Y encima le pagaban. 
Empezó más tarde una empresa de cookies Zoë’s Cookies, como consecuencia de sus clases de negocios en la Universidad. Tenían que escribir un plan de negocio y ella llevó el suyo al banco, consiguió un préstamo, se tomó un semestre de excedencia de la escuela y se dedicó a ello. 
Cocinaba las galletas en un apartamento pequeño y las vendía en un carrito que le había hecho su novio. Fue un éxito aunque no se hizo rica, pero le permitió volver a la escuela y conseguir su BFA (Bachelor of Fine Arts). 
Al poco se graduó en la Universidad del Valle de México, se casó con su novio Graham, viajaron por Europa y se establecieron en Minneapolis. Y allí Zoë conoció el mundo de las cocinas profesionales. 
Se dio cuenta que necesitaba una educación más profunda en la técnica de pastelería así que hizo un curso en el Culinary Institute of America en Nueva York. 
Mientras estudiaba consiguió un trabajo con Andrew Zimmern que estaba abriendo un restaurante y necesitaba un ayudante del chef de pastelería. Cogió el trabajo y dejó la escuela y se convirtió en su chef de pastelería en 6 meses. 
Trabajó en varios restaurantes de la cadena y continuó desarrollando menús de pastelería como freelance. Dejó la rutina de los restaurantes cuando tuvo a sus dos hijos. 
En una clase de música de su hijo pequeño, conoció a Jeff Hertzerg, que estaba allí con su hija. Se hicieron amigos y cocinaban juntos. Sus libros de pan han enseñado a hacer pan casero a una generación. 
Han vendido cerca de 800.000 copias. Sus libros han estado presentes en periódicos, programas de Tv de cocina e incluso están en el prestigioso tomo sobre hornear pan, Modernist Bread de Nathan Myhrvold. Zoë ha enseñado a hacer pan desde el inicio de sus trabajos en la cocina de Zimmern. 
Según sus palabras, Zoë tiene gran habilidad en explicar conceptos e ideas a gente sin experiencia. 
Hoy en día tiene 20 años de experiencia en dar clases. También doy clases online, a través de sus cursos en BluePrint.com, pero también en su Instagram y Youtube videos. 
Las recetas de Zoë han aparecido en docenas de artículos, en revistas como Better Homes and Gardens, Bake from Scratch, Fine Cooking, Midwest Living, Disney, Cooking Channel, Easy Eats, Mother Earth News, Cooking Club, Minnesota Monthly y MPLS/StPaul Magazines.



Tarta de chocolate y malvavisco

Ingredientes: 


Para el bizcocho:

  • 4 huevos. 
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla. 
  • 100 gr de azúcar. 
  • 100 gr de mantequilla.
  • 200 gr de chocolate negro. 
  • 6 gr de levadura química. 
  • 45 gr de harina sin gluten tipo dolci.

Para el relleno:


  • 200 ml de nata para montar.
  • 50 gr de azúcar.
  • 20 gr de cacao en polvo sin azúcar.
  • 3 cucharaditas de queso crema (tipo philadelphia).

Para bañar:


  • 200 ml de nata de cocinar.
  • 200 gr de chocolate de fundir.
  • Malvavisco.


Elaboración: 

El relleno se hace montando la nata añadiéndole poco a poco el azúcar y el cacao hasta que forme estrías al batir pero con cuidado de no pasarse.


Se añade el queso crema poco a poco justo antes de terminar de montarse y batiendo a menos velocidad para que no se corte.
Se reserva en el frigorífico.
Se precalienta el horno a 180ºC mientras se prepara la masa del bizcocho.
Se baten los huevos con el azúcar y la vainilla hasta que se forme una espuma amarillenta.


En un cazo se derrite la mantequilla y se incorpora el chocolate justo antes de apartarlo del fuego, con el calor de la mantequilla es suficiente para formar la crema de chocolate del bizcocho.


Se vierte esta crema en el bol de los huevos y azúcar y se continua batiendo.


Se añade la harina y levadura y se continua batiendo hasta conseguir una masa homogénea.



Se engrasa un molde desmontable, le puse aluminio en la base para facilitar después el desmoldado. Si se usa un molde que no sea desmontable bastará con poner en el fondo un disco de papel de hornear y engrasarlo todo.
Se vierte la masa en el molde y se hornea durante 45 minutos o hasta que al pinchar en el centro con un palito este salga limpio.



Se desmolda cuando empiece a templar, si es necesario se pasa el cuchillo por las paredes para desprenderlo bien sin romper y se vuelca en un plato donde se vaya a servir.
Se corta por la mitad o en 3 capas aunque este bizcocho es tan jugoso que se puede romper si no se tiene cuidado, yo lo hice en 2 capas.
Se rellena con la crema de chocolate que tenemos reservada.
Para el baño se pone a calentar la nata y se incorpora el chocolate troceado, removiéndolo hasta que se haga una crema homogénea, si se le añade un poco de mantequilla sale mas brillante.
Se baña de chocolate cuando esta crema esté casi fría pero sin cuajar.


El malvavisco que compré eran las típicas nubes de azúcar alargadas así que las corté por la mitad y las puse sobre una bandeja con aluminio para tostarlas con poco con el mechero de cocina, antes de que estén totalmente hechas se colocan sobre la tarta y se terminan de hacer.





Nos vemos en el próximo reto de:


7 comentarios:

  1. Que ricooooo me encantan las tartas con chocolate. bss

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  2. Tiene una pinta estupenda. Tendré que esperar un poco para probarla después de tanta fiesta y festejo.
    Me la guardo.
    Besos

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  3. un vicio vicioso total! en las fechas que estamos ya no me puedo permitir ni mirarlo, pero queda guardado para cuando tenga excusa!
    un besito, feliz año!!

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  4. Elvira, tarta para los chocolate adictos! Que delícia!
    Ptnts y feliz año!!

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  5. Elvira...se ve deliciosa...la guardo para hacerla...me encanta probar todas las tartas de chocolate! Abracitos

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  6. Este reto es mi perdición...menuda pintaza tiene tu tarta. Besos

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